🌕✨ Ritual Ceremonial de la Superluna de Diciembre‘25 — Liberación y Renacer
Preparación Sagrada 🤍 1. Busca un espacio donde puedas estar en contacto con la naturaleza: la orilla del mar, un jardín o un balcón iluminado por la Luna. 2. Reúne: Una piedra blanca o cristal de cuarzo/selenita. Un cuaderno y lápiz. Agua en un vaso transparente. Una vela blanca (opcional). 3. Viste ropa ligera, blanca o clara, que permita recibir la luz lunar sobre tu piel. 4. Antes de empezar, respira profundamente tres veces, sintiendo cómo tu cuerpo se abre a la energía de la Luna. Invocación Inicial De pie, frente a la Luna, brazos abiertos hacia el cielo, pronuncia: “Luna de plenitud, luz que acaricia mi alma, acompáñame en este momento sagrado. Que tu resplandor ilumine mi interior, disuelva lo que ya no me sirve y expanda lo que está listo para florecer.” Siente cómo la luz lunar se posa en tu corazón, en tu frente y en la palma de tus manos Fase 1: Conexión y Purificación 🌕💧 - Coloca tus manos sobre el pecho, siente tu respiración profunda. - Visualiza la luz de la Luna entrando por tu coronilla, descendiendo por tu cuerpo y arrastrando consigo todo aquello que pesa. - Mentalmente repite:“Todo lo que bloquea mi luz, se disuelve en claridad. Todo lo que retengo, se libera con amor.” - Bebe un sorbo de agua, imaginando que cada célula de tu cuerpo se limpia y renueva. Fase 2: Liberación Sagrada 🔥✍️ 1. Escribe en tu cuaderno lo que deseas soltar: emociones, recuerdos, patrones, miedos. 2. Visualiza que cada palabra se transforma en luz blanca y sube hacia la Luna, donde se disuelve. 3. Si deseas, quema el papel con cuidado (o entiérralo en la Tierra), diciendo:“Entrega lo que ya no sirve, confío en la sabiduría de la Luna y de mi corazón.” Fase 3: Expansión y Manifestación ✨🌱 - Coloca la piedra sobre tu corazón. - Cierra los ojos y repite mentalmente o en voz alta:“Lo que está listo para crecer, se expande con mi luz. Lo que es mío para florecer, llega a mí con amor, claridad y alegría.” - Siente cómo desde tu corazón la energía se proyecta hacia el Universo y regresa, multiplicada, hacia ti. - Imagina que cada célula de tu cuerpo vibra en sintonía con la Luna y la Tierra.