En el mapa de Dios, Él habita en lo alto, pero también se sienta al lado de los que están rotos por dentro. Ese es Su misterio, Dios es tan grande que llena el cielo, pero tan cercano que se mete en tu cuarto cuando nadie entiende por lo que pasas. Él da vida nueva a los que ya no tienen fuerzas. Levanta el ánimo a los que sienten que su interior está apagado. No se acerca a los “duros”, se acerca a los sinceros. No a los perfectos, sino a los que le dicen: “Aquí estoy, aunque me sienta pequeño.” En el mapa humano, sentirse débil es un atraso. En el mapa de Dios, sentirse vulnerable es una coordenada que abre Su presencia. Pregúntate: ¿Me estoy dejando ver delante de Dios o sigo escondiendo lo que me pesa? Declara: “Dios, aquí estoy. Sopla vida en mí. Levanta mi ánimo y renuévame por dentro.” #PraisePrayMove #JÁRTIS

En el mapa de Dios, vemos que la gracia llega a los que sueltan el ego, no a los que se creen intocables. La gente que se expresa con dominio propio aunque todo a su alrededor quiera provocarlo. La que no explota por impulso, sino que mantiene el corazón tranquilo aunque sea complicado; esa es la gente encuentra caminos que otros pierden. Y los que de verdad quieren hacer lo correcto, los que buscan a Dios con todo su ser, los que quieren vivir limpio aunque cueste, esos avanzan más rápido, porque Dios les abre rutas que no están en ningún mapa humano. Corazón sencillo+ganas reales de agradar a Dios= coordenadas que activan Su gracia. Pregúntate: ¿Estoy soltando el ego y escogiendo lo que a Dios le gusta? Declara: “Señor, aquí está mi corazón. Quiero vivir recto y depender de Tu gracia.” #PraisePrayMove #JÁRTIS

En el mapa de Dios, los lugares bajos no son tu final, son tu punto de elevación. Dios es experto en levantar a personas que el mundo dio por perdidas, ignoradas o subestimadas. Él mira donde estás, aunque sea polvo, proceso, vergüenza o reconstrucción y dice: “De aquí te levanto Yo.” No importa cuán bajo te sientas hoy, ese no es tu destino. Cuando Dios te levanta, no solo te saca del polvo, te lleva a lugares que tú jamás hubieras alcanzado por tu propia fuerza. En el mapa de Dios, lo que parecía el lugar ma bajo se convierte en tu plataforma. Pregúntate: ¿Qué área de mi vida siento que está “en el polvo” y necesito que Dios levante con Su mano? Declara: “Dios me levanta del polvo. Él conoce mi historia, mi proceso y mis heridas. Ningún lugar bajo define mi valor, porque Dios mismo me está levantando.” #PraisePrayMove #JÁRTIS

En el mapa de Dios, la debilidad no es un error. Donde acaban tus fuerzas, Cristo empieza. El hecho de ser débiles nos hace depender de Dios y vivir su poder. Tus cansancios, tus límites, tus lágrimas…No son señales de fracaso, son señales de ubicación. Ellas revelan en qué parte del mapa estás para que Dios entre con poder. En el mapa de Dios, tus debilidades son puertas, son lugares donde Su gracia hace lo que tú jamás podrías hacer solo. Mientras más entregas tus áreas débiles, más fuerte saldrás. La fuerza verdadera no viene de ti; viene de quién camina contigo. Pregúntate: ¿Qué área débil necesito entregarle hoy a Dios para que Su poder se perfeccione en mí? Declara: “Cuando soy débil, Cristo es mi fuerza. Donde yo no llego, Él entra con poder. No camino en mis fuerzas, camino en Su gracia.” #PraisePrayMove #JÁRTIS

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