Aunque sea tarde, hay que llegar 😉
¡Hola! Estos días se me han complicado un poco, pero no quería dejar de presentarme! Me llamo Andrea, soy de Madrid y tengo 28 años. Hace cinco años lancé Andrea’s World, un concept store donde conviven distintos proyectos bajo una misma línea y estética y con un mismo propósito: celebrar las pequeñas cosas del día a día. Con el tiempo, el proyecto fue creciendo y nació también Andrea’s World Events, una agencia de organización de eventos pensada para hacer de cada celebración un momento único y muy especial. Me considero una persona muy creativa y tenía que plasmarlo en algún lado de alguna manera. Empecé sin tener muy claro cómo enfocarlo, simplemente con una intuición muy fuerte de que debía hacerlo y de que, tarde o temprano, funcionaría. Durante estos años lo he compaginado con otros trabajos, principalmente llevando la comunicación de varias marcas de moda. El año pasado me casé y aproveché para lanzar la parte de eventos, algo que llevaba queriendo hacerdesde que hice un curso de wedding planner con mi madre mientras estudiaba la carrera. Estos 5 años que he trabajado por cuenta ajena, dentro del mundo de la comunicación, gran parte de mi tiempo lo dedicaba a organizar grandes eventos, pero empezar en el mundo de las bodas sin portfolio es complicado, pero por fin, está empezando a materializarse. He entrado en Sin Plan B porque no tengo ni idea de publicidad y necesito aprender a mover mis servicios con paid. No quiero seguir dependiendo únicamente del orgánico ni esperar meses o años a que termine de despegar. Quiero tener el control real de mis ingresos. Mi sueño es que Andrea’s World termine de tomar forma: producir nuestra propia vajilla y decoración para casa, abrir una línea de papelería, incluso una marca para niños (soy fan absoluto del mundo bebe…) Todo siguiendo siempre la misma estética para que conviva dentro del universo Andrea’s World. Quiero convertirlo en algo más que una marca: un espacio aspiracional y cercano, donde la comunidad pueda disfrutar, desconectar, leer un blog de recomendaciones, asistir a talleres…Y, cuando esto esté encaminado, mi mayor sueño es comprarme una casa en el campo. Decorarla con mucho mimo y convertirla en ese lugar de desconexión donde compartir tiempo con mi familia y mis amigos, que son mis dos pilares fundamentales.