Hoy me regalaron un alfajor muy especial…
Un clásico de América del Sur, pero en versión consciente:
apto celíacos, diabéticos y veganos.
Me sorprendió lo rico que es y lo bien hecho que está.
Un recordatorio de que también podemos darnos un mimo dulce
sin salirnos del camino de bienestar.
A veces, la vida también se endulza así: con pequeños gestos que cuidan. 🤎
¿Alguien más probó versiones saludables de nuestros dulces típicos?