📜 REVELACIÓN DEL ALMA N° 67 — EL AMOR VERDADERO
Hay un tipo de amor del que casi nadie habla. No es romántico, no es de pareja, no es de expectativas. Es Amor Verdadero. El amor que no busca nada. El amor que simplemente es. La mayoría de las personas confunde amor con apego, con carencia, con necesidad de aprobación. Creen que amar es recibir algo a cambio. Creen que amar es que el otro no cambie, no se vaya, no se equivoque. Creen que amar es controlar. Pero ese no es el amor que sana. Ese no es el amor que eleva. Ese no es el amor que viene de Dios. El Amor Verdadero es el que no exige. No manipula. No condiciona. No atrapa. No presiona. No suplica. No reclama. El Amor Verdadero no te pide que seas perfecto, te invita a ser auténtico. No espera que no cometas errores, te ofrece un espacio seguro para crecer. No se aferra al miedo, se sostiene en la libertad. No se guía por la carencia, se guía por la plenitud. El Amor Verdadero es amar incluso cuando duele un poco. Amar incluso cuando el ego se siente tocado. Amar cuando alguien te molesta, porque entendés que esa persona también está lidiando con su propia oscuridad. Es amar desapegadamente, con ese amor que no necesita garantías porque sabe que su fuente es divina. No humana. No circunstancial. Divina. Amar así no te hace débil. Te hace inmenso. Te hace libre. Te hace canal. Te hace luz. Te hace Dios en movimiento. Cuando amás desde ese lugar, se derrumban las heridas del pasado. Se desprograman los miedos. Se disuelve la necesidad de justificarte, defenderte, explicarte, protegerte. Porque entendés que nada real puede ser amenazado. Y nada irreal existe. El Amor Verdadero no es sentir algo bonito, es elegir ver la divinidad en todo. Verla en quien está perdido. Verla en quien te hiere desde su herida. Verla en quien no puede darte lo que vos querés. Verla en los que no creen en vos. Verla en los que te enojan. Verla en vos. Si querés vivir una vida extraordinaria, si querés despertar, si querés conectar con tus guías, con tu alma, con Dios… tenés que aprender a amar así: