La mayoría cree que “cambiar de vida” significa cambiarlo TODO por fuera:
- Nuevo trabajo
- Nueva ciudad
- Nueva pareja
- Nuevo entorno
Y sí, a veces eso ayuda.
Pero hay algo más incómodo (y más poderoso):
seguir con la misma vida externa…
y cambiar por completo la forma en la que te relacionas contigo mismo.
Si te está pasando esto, léelo con atención:
- Te propones metas… y las vuelves a abandonar.
- Sabes lo que “deberías” hacer, pero no lo haces.
- Te hablas mal cuando fallas.
- Sientes que no confías en ti, ni en tu palabra.
Eso no es solo falta de motivación.
Es una relación rota contigo mismo.
Durante mucho tiempo, yo hacía esto sin darme cuenta:
- Me prometía cosas que no cumplía.
- Me comparaba con todos.
- Usaba cada fallo como prueba de que “no valgo”.
Resultado:
- Mis hábitos eran inestables.
- Mi autoestima se hundía.
- Sentía que mi vida no avanzaba… aunque “lo intentaba”.
Hasta que cambié el enfoque.
En lugar de intentar cambiar toda mi vida desde fuera, empecé por algo más pequeño pero mucho más profundo:
👉 la forma en que me hablaba, interpretaba mis resultados
y actuaba cada día.
Lo trabajé intensamente durante 30 días.
No cambié de trabajo.
No cambié de ciudad.
No apareció una oportunidad mágica.
Lo que cambió fue esto:
Lo que hice en esos 30 días
1️⃣ Protocolo diario sencillo (pero incómodo)
Cada día, al final del día, escribía:
- 1 cosa que hice bien.
- 1 cosa que hice mal.
- 1 ajuste concreto para mañana.
Sin drama.
Sin insultarme.
Solo datos para mejorar.
2️⃣ Nueva regla para mis fallos
Hasta ese momento, cada fallo = prueba de que “yo era el problema”.
Durante esos 30 días cambié la regla:
- El fallo NO define quién soy.
- El fallo solo INFORMA lo que debo ajustar.
Dejé de tomarme todo como algo personal
y empecé a verlo como un proceso.
3️⃣ Una acción de “ganador” cada día
Cada día hacía al menos una cosa incómoda que me acercara a la vida que quería:
- Entrenar aunque no tuviera ganas.
- Decir NO a algo que me restaba.
- Avanzar un poco en un proyecto importante.
No para impresionar a nadie.
Sino para enviarle este mensaje a mi cerebro:
“Cuando digo que hago algo, lo hago.
Puedes confiar en mí.”
¿Qué cambió en 30 días?
- Mi diálogo interno dejó de ser mi enemigo.
- Empecé a creer en mi palabra otra vez.
- Volví a sentir que mi vida podía avanzar,porque por fin yo estaba actuando distinto.
Eso fue el inicio real de cambiar de vida.
Desde dentro hacia afuera.
Grabé un video donde te explico exactamente el proceso:
👉 “Así elevé mi autoestima en 30 días (y empecé a cambiar mi vida)”
Ahí te cuento:
- Cómo apliqué este sistema paso a paso.
- Ejemplos reales de mis 30 días.
- Cómo adaptarlo a tu situación (deporte, estudios, negocio, hábitos, etc.)
(Lo tienes también en el Módulo de Mentalidad Ganadora)
Cuando lo veas, vuelve a este post y responde:
- ¿Qué parte te hizo más clic?
- ¿Qué vas a aplicar hoy, no “algún día”?
Quiero que este espacio en Skool no sea solo inspiración,
sino un lugar donde cambias tu vida en tiempo real,
una decisión y una acción incómoda a la vez. 💥